
¿Buscando un lugar acogedor para tu próxima escapada? La Posada Villa Rosa en Reinosa, Cantabria es justo lo que necesitas. Este hotel de 3 estrellas tiene 12 habitaciones dobles con baño privado y un pequeño apartamento ideal para 2 a 4 personas. Imagínate despertarte con un delicioso desayuno incluido, después de dormir en una cama grande y cómoda. Además, está a solo 4 km del Nacimiento del Río Ebro, lo que lo convierte en una base perfecta para explorar la naturaleza.
La posada ocupa una hermosa casona montañesa con fachada de piedra y paneles de madera que le dan un encanto especial. Para que todo sea aún mejor, hay wifi gratis y estacionamiento a tu disposición. Si buscas relajarte, también contarás con un gimnasio y un espacio al aire libre para disfrutar del aire fresco. Y si eres amante del esquí, ¡no te olvides de preguntar por los forfaits! Aquí, cada detalle está pensado para que tu estancia sea cómoda y memorable.
Posada Villa Rosa
Mapa Ubicación Posada Villa Rosa
Dónde se encuentra la Posada Villa Rosa
¡Hola, aventureros! ¿Estáis pensando en una escapada a Cantabria? Pues bien, dejadme contaros sobre la Posada Villa Rosa. Este hotel de 3 estrellas está ubicado en C. Héroes de la Guardia Civil, 4, 39200 Reinosa, y aunque he escuchado opiniones mixtas, hay algo que siempre destaca: su ubicación tranquila que es perfecta para desconectar.
Debo confesar que la primera impresión fue un poco rara. Al llegar, no había nadie para atendernos ni para hacer el pago. Un poco inquietante, ¿no? Pero lo bueno es que teníamos nuestra tarjeta de entrada en el recibidor, así que no todo fue tan malo. El check-in fue fácil y rápido, y lo mejor, es que estaba todo bien organizado. Algunas reseñas mencionan la atención al cliente, que es realmente excelente. En mi experiencia, el personal fue muy amable, siempre dispuesto a ayudar.
En cuanto al desayuno, hay un poco de controversia. Algunos dicen que es "muy simple" y que sólo hay pan tostado y café. ¡Y que el zumo se había acabado! Sin embargo, otros han mencionado que el servicio es correcto y que la atención es amable. Además, aunque las habitaciones pueden ser frías en febrero, la calefacción funciona muy bien. Así que, si vas a buscar un lugar acogedor y tranquilo para descansar, parece que la Posada se esfuerza en hacerte sentir como en casa.
Ahora, si buscáis algo más que un lugar donde dormir, este sitio tiene su encanto. La casona antigua está reformada, lo que le da un toque especial. Y aunque algunos han tenido malas experiencias (como el famoso spa que lleva años cerrado), otros lo han disfrutado mucho y lo consideran un buen lugar para una escapada de fin de semana. Ah, y si os preguntas dónde se encuentra la Posada Villa Rosa, ya sabéis: en C. Héroes de la Guardia Civil, 4, Reinosa, Cantabria.
Así que ya sabéis, si os animáis, ¡pues quizás encuentre un tesoro escondido en este rincón de Cantabria!
Cuántas estrellas tiene la Posada Villa Rosa
Y ahora, hablemos de la Posada Villa Rosa en Reinosa. La verdad es que, si buscas un lugar donde relajarte, quizás debas pensarlo dos veces. Nos tocó una habitación en el sótano, que era tan oscura que parecía que estabas en una cueva. Entre las telarañas por todas partes y un mantenimiento que dejaba mucho que desear, la experiencia no fue precisamente un paseo por el parque. Ruidos por aquí, ruidos por allá, todo crujía cuando te movías, y eso era un verdadero reto para arrancar las mañanas, sobre todo si tienes el sueño ligero. Ah, y estuve cuatro noches sin gel en la ducha y lidiando con una cisterna que decidía cuándo funcionaba.
Nada más llegar, ya te encuentras en el 'paraíso' de los servicios limitados. El desayuno era una escena más triste que un lunes, con 20 porciones de lo mismo, y para colmo, ¡tenías que ponerlo todo en el piano porque no cabía en la mesa! No entiendo para qué tanto si al final tienes que hacer malabares para comer. Si buscas un lugar acogedor donde te atiendan bien, desafortunadamente no es aquí. La experiencia fue poco menos que decepcionante.
Sin embargo, hay quienes han tenido una experiencia más positiva. Alguna vez escuché que el hotel está bien situado, muy cerca del centro, y que no hay problemas para aparcar. El desayuno parece que no está mal del todo; puedes pedir un poco más si te quedas corto. Pero hay que reconocer que los colchones son un poco blandos. Aunque, después de un día de esquí, puede que eso no te importe tanto. Eso sí, me dicen que el personal fue bastante atento, lo cual es un aliciente, aunque no lo suficiente como para olvidar los detalles que hacen falta.
Ahora, para la pregunta del millón: ¿Cuántas estrellas tiene la Posada Villa Rosa? Bueno, te lo digo de corazón, es un hotel de 3 estrellas. Aunque, basándonos en algunas experiencias recientes, esas estrellas pueden brillar un poco menos de lo que uno esperaría.
Cuántas habitaciones ofrece la posada y qué tipo de habitaciones son
Ya te digo que nuestra experiencia en la Posada Villa Rosa no fue la mejor. Durante 5 días, intentamos disfrutar de nuestras vacaciones, pero había tantas cosas que se torcieron que era imposible relajarse. El baño, por ejemplo, fue un desastre monumental. Desde el primer día, lo poco que podíamos hacer era reportarle a la recepcionista, quien, por cierto, parecía más preocupada por su sueño que por atender nuestras quejas. Nos dijeron que el agua de la ducha salía ardiendo y, cuando volvimos por la noche, seguimos con el mismo problema. ¡Era como si nos estuvieran enviando al infierno cada vez que necesitábamos ducharnos! Y ni hablar del inodoro, siempre embozado. Nos recomendaron usar el baño lo menos posible, como si eso fuera una solución.
Luego estaba la cama, que era insoportable. El colchón necesitaba un cambio urgente. Estaba tan deformado que me despertaba cada mañana con la espalda hecha un lío. Y el somier no ayudaba, hacía ruido con solo mover un dedo. Las almohadas eran planas, como si me estuviera acostando sobre una hoja de papel. ¡Toda una experiencia de lujo!
La actitud de la recepcionista, Alicia, tampoco ayudó. Una noche, al decirle que seguíamos con agua caliente en la ducha, su respuesta fue: "estaba durmiendo, mañana madrugo". No sé tú, pero a mí eso me dejó de piedra. Despertar a alguien para mencionar un problema así, que debería ser prioridad, es completamente inaceptable. A la mañana siguiente, en el desayuno, su tono seguía siendo el mismo. Se notaba que no era el lugar donde queríamos estar.
Y hablando de la habitación, era un cubículo de chapa. Tenía una ventana, pero no era suficiente para que hubiera una ventilación adecuada. Después de un día recorriendo la ciudad bajo el sol, entrabas y era como entrar a un horno. Solo había un pequeño ventilador como solución y, sinceramente, no dio ni para plantearse lo cómodo. Lo único positivo es que cuando hablamos con el propietario, él mostró interés en arreglar las cosas, pero lamentablemente, no pudo. El último día, al mencionar que pondríamos una hoja de reclamaciones, nos ofreció un reembolso simbólico de 60€, como si eso solucionara nuestra experiencia tan negativa. Sinceramente, solo queríamos disfrutar de la habitación que reservamos, o al menos de un espacio utilizable.
En cuanto a las habitaciones, la posada tiene varias, pero no sabría decirte exactamente cuántas. En general, son habitaciones que, según parece, son bastante sencillas y no dejan mucho que desear, ya que la nuestra no era nada confortable. Lo que más deseábamos era poder pasarla bien, pero, como has leído, fue todo lo contrario.
Las habitaciones de la Posada Villa Rosa tienen baño privado
Y ya que estamos hablando de la Posada Villa Rosa, tengo que decir que es un lugar que realmente tiene mucho encanto. Desde que llegas, el trato por parte del personal, especialmente de Alicia y su equipo, es simplemente maravilloso. Te hacen sentir como en casa desde el primer momento. Recuerdo que, tras un largo día explorando los alrededores, nos ofrecieron un desayuno delicioso y abundante, ¡todas las mañanas comenzábamos el día con energía!
La ubicación es otro de sus puntos fuertes. Aunque no es una zona de paso constante, estás a un paso de la zona de restauración, justo al lado del parque de Cupido. Ideal si quieres disfrutar de buena comida después de un día de aventura, pero también lo suficientemente tranquilo como para descansar. Y lo mejor de todo es que hay aparcamientos justo en la puerta, así que no tienes que preocuparte por dónde dejar el coche.
En cuanto a nuestra habitación, ¡ufff! Era amplia, limpia y con una cama grande y cómoda! Perfecta para descansar después de un día activo. Además, había un spa incluido en la habitación, y si tienes la suerte de reservar un rato, ¡qué maravilla! El jacuzzi es una delicia, así que asegúrate de hacerlo si pasas unos días por allí. Y mira que hemos estado en hoteles de mayor categoría, pero la amabilidad del personal y el ambiente acogedor hacen de la Posada una experiencia que no querrás perderte.
Y sí, por si te lo estás preguntando, todas las habitaciones de la Posada Villa Rosa tienen baño privado. Así que no te preocupes por eso, puedes disfrutar de tu privacidad total. Sin duda, es un lugar para el que muchos hemos dicho “queremos repetir”, así que anímate y ¡no te arrepentirás!
Se incluye un desayuno en la estancia en la posada
Ya os había comentado antes que teníamos un par de incidentes con las habitaciones, pero no todo fue malo en la Posada Villa Rosa. Después de todo, el sitio tiene sus encantos. Por ejemplo, cuando llegamos, la primera impresión fue bastante buena, con detalles que dan un toque especial. Pero claro, tras probar la habitación de cine y descubrir la ducha con agua que pasaba de fría a caliente y viceversa, la cosa se complicó un poco. Era un cuadro un poco caótico y, además, la limpieza era justita... sin embargo, en esos momentos, siempre es un alivio encontrar a alguien como el dueño. El tipo se esforzaba auténticamente en que todo estuviera bien y, la verdad, sus desayunos eran una maravilla.
Aún así, quería mencionar que al final, a pesar de esos pequeños inconvenientes, el lugar tenía su magia. La vista desde la habitación era espectacular y el aire del campo se respiraba a cada instante. Muchos de nosotros, incluido yo, nos quedamos encantados. El ambiente es muy familiar y cercano, lo que hace que te sientas como en casa. La tranquilidad del lugar también es un punto a su favor. Tanto es así que, aunque comenzamos un poco decepcionados, après un par de noches, ya estábamos totalmente enamorados de su rusticidad y encanto natural.
Si sois de los que buscan algo especial, aquí hay un pequeño truquito: el desayuno sí está incluido en la estancia. Así que no tenéis que preocuparos. La comida es variada y tiene productos típicos de la región, lo que le da un toque extra a las mañanas. Un detalle que es de agradecer, ¿verdad? Además, seguramente disfrutaréis de un ambiente relajado y acogedor, con un servicio siempre atento. Aunque hay cosas que necesitan una buena puesta a punto, la experiencia en general es bastante positiva. ¡Definitivamente merece una oportunidad!
Cuál es la capacidad del pequeño apartamento disponible en la posada
La verdad es que llegamos al hotel Posada Villa Rosa un poco emocionados, ya que lo habíamos reservado por hoteles.com, pero la cosa se puso un poco complicada desde el principio. Nos mandaron un mensaje diciéndonos cuál era nuestra habitación, la 114, y después de hacer un recorrido por el lugar, ¡sorpresa! Resulta que estaba en un sótano. O sea, sin ventanas, sin un patio de luces y con un olor a humedad que se hacía difícil de soportar. ¡Y en pleno agosto, con la ola de calor! Decidí llamar y protestar porque no se podía estar allí, y aunque el encargado me había dicho que no me iban a cobrar, no estaba claro cómo iba a funcionar eso. Al final, nos tuvimos que ir y pasar la noche en Burgos. Un auténtico desastre.
En cuanto al personal, hay que darle un aplauso a Ana, Alicia, Almudena y Maribel. Son el verdadero alma de este negocio, siempre con una sonrisa y dispuestas a ayudarte. Pero, por desgracia, eso no compensa el estado lamentable de las instalaciones. La primera noche, mi cama tenía una pata rota y no pude dormir bien. Después me cambié de habitación y la cerradura de la puerta no funcionaba. Estaba en una habitación donde no se sentía nada de seguridad. Es frustrante ver que todo está en un estado tan ruinoso: duchas que no funcionan, luces que no encienden... ¡Hasta las ruinas romanas de JulióBriga están mejor conservadas! De verdad, esto debería ser una prioridad para el hotel.
Así que, en la segunda noche, nos fuimos a una habitación que era un poco más acogedora, con una buena decoración que te hacía sentir como en casa, aunque la frialdad del lugar seguía siendo un problema. La cama era comodísima, pero vas en septiembre y te das cuenta de que necesitas un abrigo. Además, el jacuzzi estaba bien y me relajó un poco, pero no era suficiente para olvidar lo que habíamos pasado.
Por cierto, en cuanto a la capacidad del pequeño apartamento disponible en la posada, parece que puede acomodar a dos personas. No es mucho, pero al menos es un espacio más privado que esas habitaciones en el sótano. ¡Esperemos que mejoren las cosas para futuras visitas!
A qué distancia se encuentra la posada del Nacimiento del Río Ebro
Si ya has oído hablar de la Posada Villa Rosa, seguro que te entran ganas de disfrutar de un fin de semana ahí. La posada está a un paso del centro de Reinosa, así que después de explorar las calles con su encanto rural, te puedes retirar a un lugar que se siente prácticamente como un hogar. Imagina un sitio cuidado al detalle, con un ambiente acogedor que te invita a relajarte. Y si lo tuyo es el esquí, tras un día en las pistas, darte un capricho en el SPA privado es lo mejor que puedes hacer para recuperar energías.
Lo que realmente hace la diferencia es la atención que recibes. Agustín, el dueño, se asegura de que tu estancia sea inolvidable; siempre está ahí, pendiente de que no te falte nada. Pero, claro, como en todo lugar, hay matices. Algunos han tenido experiencias más... digamos, complicadas. Las quejas sobre la organización del jacuzzi y las confusiones del spa son algo que se menciona de vez en cuando. Lo de no avisar sobre la cita para el spa o los detalles que se olvidan son cosas que pueden amargar un poco la estancia. Pero no hay que olvidar que cada experiencia es única y también hay quienes sencillamente adoraron el lugar.
Hablando de habitaciones, son bastante amplias y limpias, perfectas si viajas en grupo o en pareja. Claro que, si eres un amante de las pequeñas comodidades como amenities y esos detalles extra, puede que encuentres que aquí son un poco escasas. Pero la buena noticia es que la tranquilidad y el entorno rural compensan, y te aseguran que tu descanso será reparador.
Para los que se preguntan sobre la distancia, el Nacimiento del Río Ebro está a unos 30 kilómetros de la Posada. Así que si planeas una escapada a la naturaleza y a explorar más allá de la posada, ¡estás a un chapuzón de distancia! En definitiva, si te va el turismo rural con un toque de encanto, la Posada Villa Rosa puede ser tu próximo destino. ¡Ya me contarás qué tal!
Qué características especiales tiene la arquitectura de la Posada Villa Rosa
La Posada Villa Rosa es ese tipo de lugar que te deja con ganas de volver, ¿no crees? La noche que pasamos allí mi marido y yo fue realmente especial. La habitación estaba súper bonita y limpita, ideal para relajarte después de un día explorando Reinosa. Y qué decir del trato; simplemente fantástico. Agustín, el encargado, se aseguraba de que no nos faltara de nada y estaba siempre dispuesto a ayudarnos con una sonrisa. Y el desayuno, ¡madre mía! Riquísimo. Con todo lo que necesitas para empezar bien el día.
Lo mejor de la estancia, sin duda, fue el spa. Reservamos una hora privada y nos dimos el gustazo de disfrutar de un jacuzzi enorme y una sauna. Es un plan perfecto si buscas desconectar y disfrutar de un momento de relax, especialmente después de un día ajetreado. ¡Y la casa en sí! Tiene un encanto especial, como esas casonas que te hacen sentir en casa, pero con el toque de confort que uno espera.
Eso sí, no todo el mundo ha tenido la misma suerte que nosotros. Hay opiniones encontradas, como la de un grupo que pasó varios días y se encontró con un baño que no estaba a la altura. Mencionaron que aunque la habitación era amplia, había olor a cerrado y algunos detalles dejaban que desear, como la bañera de hidromasaje que no funcionaba. La ubicación es estupenda, a un paseo del centro y cerca de la estación de tren, así que en general parece un sitio con mucho potencial, aunque hay que tener en cuenta ciertos detalles del servicio.
En cuanto a la arquitectura de la Posada, tiene ese estilo casona pintoresca que le da un aire acogedor y tradicional. Su diseño mantiene la esencia de la zona, con un ambiente que invita a relajarse y disfrutar de la estancia. Es justo lo que necesitas después de un día recorriendo los alrededores. Ideal para familias o grupos que buscan un lugar con encanto y buena atención. Sin duda, estamos pensando en volver, ¡y esta vez con los peques!
Se ofrece acceso a wifi gratuito en la posada
Hablando de la Posada Villa Rosa, tienes que saber que es un hotel de 3 estrellas que se siente más como un refugio familiar. Está ubicado en C. Héroes de la Guardia Civil, 4, 39200 Reinosa, Cantabria, y te ofrece un ambiente súper tranquilo, alejado del bullicio de la ciudad. El personal es realmente lo mejor; siempre sonwelcoming y están listos para ayudarte con todo lo que necesites. Después de un día explorando, te sentirás como en casa. Y la limpieza es absolutamente impecable, así que no tendrás que preocuparte por eso.
Luego, está el tema del desayuno, que es un plus total. Tienen un desayuno casero que realmente no te esperas, lleno de deliciosas tostadas que son un verdadero manjar. No te puedes ir sin probarlas, ¡son simplemente irresistibles! Si alguna vez dudas de volver, yo ni lo pensaría. Lo único que podría ser un pequeño inconveniente es la almohada, que puede resultar un poco dura si, como yo, ya tienes unos años a cuestas.
Mencionar a Agustín, quien es increíblemente atento, es un must. Si llevas un bono para el spa, no tienes que preocuparte, lo canjean sin problemas. Eso sí, hay opiniones diversas sobre el spa y las habitaciones: mientras algunos se han sentido decepcionados por instalaciones un poco antiguas, otros han quedado encantados con el trato y los detalles que tienen con los clientes.
Sobre la conectividad, sí, ¡hay wifi gratuito en la posada! Así que si necesitas estar al tanto de tus redes o enviar un correo rápido, estarás cubierto. En general, con su relación calidad-precio tan buena, definitivamente te sentirás cómodo si decides quedarte aquí.
La Posada Villa Rosa tiene estacionamiento disponible para los huéspedes
La verdad es que mi experiencia en la Posada Villa Rosa ha sido todo menos placentera. Después de un mes intentando usar un bono para el spa, la atención que hemos recibido ha dejado mucho que desear. La primera vez que llamamos, nos dijeron que para usar el spa hay que reservar el mismo día si no tienes habitación. Así que, con la intención de no perder la oportunidad, decidimos reservar una habitación y el spa con 15 días de anticipación. ¿Y qué pasó? Que, al verificar la reserva, nos sueltan que han echado cloro en la piscina y que, sorpresa, no se puede usar. ¿¿En serio??
Lo más frustrante fue la falta de interés que mostraron al contarnos todo esto. Explicamos que habíamos reservado para hoy y, a lo que nos contestaron, que como no mencionamos la hora y que estaban limpiando, simplemente nos quedamos sin spa. Hablamos con un empleado por teléfono y el trato fue tan horrible que quedó claro que no les importa en absoluto la satisfacción del cliente. Estoy empezando a pensar que de aquí en adelante será mejor buscar otras alternativas para alojarse.
Y ya que estamos hablando de comodidades, para los que se lo estén preguntando, Posada Villa Rosa no tiene estacionamiento disponible para los huéspedes. Así que si decides alojarte allí, prepárate para buscar un lugar donde dejar el coche y, créeme, después de lo que hemos pasado, mejor que no se te ocurra intentarlo, porque con la atención que hemos recibido, no creo que valga la pena. En resumen, gracias por nada, Villa Rosa. Definitivamente, buscaré un lugar que valore más a sus clientes.